La independencia financiera que proporciona la blockchain tiene sus costos, ya que los usuarios tienen pleno poder sobre sus criptoactivos, pero también tienen plena responsabilidad por su seguridad.
Básicamente, el Bitcoin y otras criptomonedas corresponden a información registrada en la blockchain. Y que puedes acceder a través de llaves privadas almacenadas en una cartera digital.
Una cartera digital crea pares de llaves criptográficas coincidentes: una llave pública para aceptar transacciones y una llave privada para enviar fondos y transaccionar en la blockchain.
Las carteras digitales inicialmente fueron creadas para Bitcoin, la primera y más famosa moneda virtual. Sin embargo, hoy en día existen carteras para todo tipo de criptomonedas.
Tipos de carteras digitales para criptomonedas
Existen dos tipos de carteras para las criptomonedas: Las llamadas carteras calientes (Hot Wallet) como MetaMask o TrustWallet y las carteras frías (Cold Wallet) como Ledger Nano X, Trezor One, SafePal.
Hot Wallet
Las Hot Wallet están vinculadas a la web, y como mínimo, a una red de blockchain específica.
Esto implica ciertos riesgos, ya que, almacenan las llaves privadas en la Web, y así, todo lo que un hacker tendría que hacer es llevar a cabo un ataque para capturar la llave privada, y robar los fondos la cartera.
Dos buenas prácticas para este tipo de carteras son: nunca guardar la *seed phrase en ningún dispositivo electrónico conectado a internet y siempre cerciorarse sobre la seguridad de la blockchain o aplicación a la que se está conectando.
*seed phrase: conjunto de 12 a 24 palabras, que proporcionan una forma fácil y sencilla de respaldar una cartera de criptomonedas.
Si bien el robo de criptomonedas ocupa los titulares, la verdad es que la seguridad de este tipo de carteras parece ser cada vez mayor.
El robo de criptomonedas cayó un 57% en 2020, según un estudio de CipherTrace, una firma de análisis y seguridad de blockchain.
Una ventaja de las carteras calientes (Hot Wallet), es la flexibilidad para transaccionar. Además, la mayoría de estas carteras son gratuitas a diferencia de las carteras frías (Cold Wallet).
Cold Wallet
Las llamadas carteras Cold Wallet, están vinculadas a un hardware que no está conectado a internet lo que reduce significativamente los vectores de ataque, las hace mucho más seguras.
Si estás interesado en comprar una cartera fría, asegúrate de comprarla directamente con el proveedor, ya que existen revendedores que venden estos dispositivos ya manipulados.

Dicotomía de carteras para criptomonedas
Carteras calientes | Carteras frías |
Están conectadas a internet | No están conectadas a internet |
Los hackers pueden obtener la ruta hacia la cartera | Solo se pueden acceder desde un dispositivo físico |
Transacciones en línea son más rápidas | Tardan más en realizar las transacciones |
Conclusión
Actualmente, se ha dado una especie de convergencia: las carteras calientes se están volviendo más seguras y las carteras frías son cada vez más flexibles.
Lo ideal es tener una combinación de carteras para lograr un equilibrio entre la flexibilidad de una cartera caliente y seguridad de una cartera fría.