Luchador de Muay Thai sobrevive a ataque de Pitbulls

Luchador de Muay Thai sobrevive a ataque de Pitbulls

En la mañana del domingo 29 de junio, un hecho impactante irrumpió en la rutina del luchador y profesor de Muay Thai Ernesto Chaves, conocido como Bocão, de 33 años, en Ponta Porã, Mato Grosso do Sul.

Mientras corría por la Rua Jorge Roberto Salomão, en la Vila Militar, Ernesto fue atacado por dos pitbulls sueltos que lo sorprendieron en medio de su entrenamiento.

El incidente, grabado en video, se volvió viral en redes sociales, generando un debate sobre la responsabilidad de los dueños de animales de gran porte.

Con auriculares puestos y distraído por el frío y la neblina, Ernesto pensó inicialmente que las dos hembras adultas querían jugar.

Sin embargo, la situación escaló rápidamente: uno de los perros le mordió la pierna, mientras el otro intentó atacar su cuello. Gracias a sus 13 años de experiencia en Muay Thai y Jiu-Jitsu, Ernesto mantuvo la calma y logró inmovilizar a los animales tras unos cinco minutos de lucha intensa. “Creí que iba a morir. Eran extremadamente fuertes”, confesó al portal G1.

Luchador de Muay Thai sobrevive a ataque de Pitbulls

El luchador sufrió heridas en la pierna y un dedo fracturado, pero fue atendido en el Hospital Regional de Ponta Porã, donde se recupera satisfactoriamente. Vecinos ayudaron a controlar a los perros con cuerdas, y la policía intervino.

El dueño de los pitbulls, un trabajador de un galpón municipal, afirmó que los animales estaban allí para proteger el lugar contra robos, pero no explicó cómo se escaparon.

Fue llevado a la comisaría y enfrentará cargos por omisión en la custodia de animales.Este caso enciende una alerta: a pocos metros del lugar, funciona una guardería frecuentada por niños.

“Si hubiera sido un niño, habría sido fatal. Esto debe servir de lección”, destacó Ernesto, subrayando la importancia de la responsabilidad de los dueños.

Los animales de gran porte sueltos en áreas públicas representan un peligro, especialmente en zonas transitadas.

Este incidente refuerza la necesidad de mayor fiscalización y concienciación sobre la tenencia responsable de mascotas.