A finales de julio de 2025, una foto de la modelo japonesa y exídolo de J-pop Saori Araki (@kawausosuki0513) se volvió viral en X. Publicada el 24 de julio, la imagen la muestra con un elegante traje gris, sosteniendo una laptop y sonriendo con las mejillas infladas.
Con un simple «Buenos días » en japonés, la publicación alcanzó más de 40 millones de vistas y 100,000 likes en solo cuatro días.Conocida como la «Oficinista Japonesa» o «Chica Japonesa de Traje», la imagen de Araki desató una fiebre de memes.
En X, los usuarios la celebraron con humor y admiración, comparándola con figuras occidentales como Sydney Sweeney. Un usuario, @eigenrobot, juntó fotos de ambas, logrando 50,000 likes en un día.
Otros, como@FroegVol4, bromeaban pidiendo disculpas históricas, mientras @badchestpain decía que chocaría su auto por su encanto.
Araki, exmiembro del grupo Tokyo Girls Bravo, aprovechó la fama. El 27 de julio, compartió otra foto en traje, esta vez con un signo de paz, llamándola la «versión pacífica». Actualmente trabaja como modelo y actriz en Japón.
“Hasta principios de este año, formaba parte de un grupo de ídolos”, reveló. “He leído todos sus cariñosos mensajes. Muchas gracias por todo el cariño y apoyo”.
La «asalariada» japonesa viral se une a YouTube
El 29 de julio, subió un corto de YouTube donde habla de cómo su rostro se ha difundido en internet.
«Gracias por estar aquí y estoy emocionada de comenzar este viaje contigo.»
Al momento de escribir esto, el canal de SAO ya tiene poco menos de 3000 suscriptores, así que tendremos que ver qué decide hacer cuando pase el tiempo suficiente y si continúa siendo un meme viral en redes sociales.
Memes de Saori Araki, la chica japonesa que se hizo viral
Los memes continuaron, con ediciones como Araki sosteniendo un Death Note o un estudio de doctorado sobre ética olfativa. Su presentación en Instagram desde una visita a Takeda, una empresa de diseño japonesa, también sumó 20,000 likes.
Con memes, comentarios culturales y admiración, esta oficinista se ha convertido en un ícono de la Generación Z, demostrando cómo una foto puede generar una conversación global.
