¿Recuerdas cómo era Internet en los años 90? Desde la democratización de las redes, muchos cambios han ayudado a mejorar la calidad de esas páginas (que estaban restringidas a la lectura).
Hubo un tiempo en que los usuarios casi nunca interactuaban con el contenido en línea, y hoy estamos en una época en la que tenemos algo de interactividad en Internet, pero aún no podemos controlarla.
Web3 es una novedad que busca entregar todas las posibilidades en línea a toda el poder de los usuarios. Sería (al menos en teoría) completamente descentralizado y democrático, válido para todos los que ya usan internet hoy en día.
¿Quieres saber más sobre esta tendencia disruptiva? Llegó la hora.
¿Qué es Web3?
“Web3” es el término acuñado por el cofundador de Ethereum, Gavin Wood, para describir una mejor versión de Internet actual. El objetivo principal de Web3 es entregar el poder de Internet a los usuarios, no a las empresas.
Para lograrlo, Web3 se apoya en la tecnología blockchain, una cadena de bloques de datos con información transparente. Por tanto, podemos utilizar las criptomonedas como ejemplo de lo que sería Web3 en la práctica: un sistema de intercambio hecho de persona a persona, completamente descentralizado y sin necesidad de mediadores.
La mejor manera de entender el cambio que traerá Web3 es echar un vistazo a la era de Internet pasada y presente. Al fin y al cabo, Web3 no es más que la tercera generación de la evolución de las tecnologías web, que aún transita entre un universo de pura visualización e interacción para una participación mucho más activa del usuario.
Criterios básicos de Web3
Aunque es bastante difícil tener una definición exacta de lo que es Web3, aún podemos entender lo que representa por las ideas en las que se basa y los protocolos en los que se construye. Estas son sus principales características:
Internet sin permiso
Web3 se basa en la idea de que todos tienen derecho a usar Internet y nadie debe ser excluido.
Descentralización
Tanto Web1 como Web2 funcionan de forma centralizada, por lo que vemos grandes empresas que controlan y moderan el contenido de Internet. La idea de Web3 es repartir la propiedad de este contenido a los usuarios y sus creadores.
Propio sistema de pago
No se puede negar el hecho de que la industria financiera se está moviendo hacia las criptomonedas, y muchas empresas importantes, cómo Tesla, ahora aceptan pagos en Bitcoins. Web3 hace uso de criptomonedas para realizar los pagos de las contribuciones de los usuarios (en lugar de utilizar el antiguo sistema bancario). Este es uno de sus mayores beneficios.

Fácil identificación
La mayoría de las plataformas en Internet requieren que se cree una cuenta para acceder a algunas de las páginas más restringidas de su sitio web. Esto significa que, sin proporcionar información vital para crear su inicio de sesión, no puede ser identificado como miembro de la plataforma.
Los beneficios de Web3 permiten al usuario evitar este problema al crear y usar fácilmente un perfil ENS para controlar su identidad digital.
Propiedades vitalicias
Cambiar la narrativa de propiedad es una de las misiones de Web3. Un buen ejemplo para explicar esto son los juegos en línea. Si está jugando y comprando artículos en ese juego, eliminar su cuenta de la plataforma del juego significa que los artículos comprados también se perderán. Pero en Web3, usted es el propietario directo de estos elementos, que se clasifican como tokens no fungibles (NFT).
Web3, en pocas palabras, es una versión de Internet que da prioridad al usuario. Uno de sus objetivos es ayudarlos a controlar cómo se comparte su información y también a controlar quién se beneficia de ese contenido. Si quieres saber más al respecto, no dejes de leer nuestra entrada de blog sobre Blockchain y la descentralización de la web y aprende cómo blockchain puede ser la clave para la descentralización presente en la Web 3.0.